Anahís: Permíteme tutearte por la cercanía que como alcaldesa muestras con todos desde que llegaste al cabildo de Zamora. Soy villacurano, accidentalmente nacido en Caracas en el año 1949, ciudad donde solo permanecí 7 días; perito en artes gráficas y ciudadano. Llevo 72 años viviendo, amando, soñando, disfrutando y hasta algunas pocas veces casi odiando esta ciudad, donde nacieron y yacen mis padres y ancestros.
Te escribo a título personal pero sobre todo desde la visión actual que tengo sobre mi ciudad,-que creo es también la visión de muchos de mis coterráneos-, la cual siento que ya no es ese foco de atracción, no brilla con la luz de antaño. Cada vez es más difícil sentirnos orgullosos con lo que vemos y vivimos en nuestro alrededor. Merecemos tener otra oportunidad como individuos y como colectivo, pero para que este mal endémico desaparezca, necesitamos despojarnos de la desidia, de la pereza intelectual que nos frena para cuestionarnos la situación actual, de proponer alternativas y de luchar por conseguir que triunfen.
Indirectamente podría decir que no te conozco, que vine a saber de ti hace poco tiempo por tu campaña electoral y a través de las entrevistas en las radios de la localidad; entonces no me podía imaginar que en un futuro serías nuestra alcaldesa, imagino que tú tampoco.
Es poco el tiempo que llevas en el cargo, apenas 35 días, pero ya se han dejado ver muestras de un cambio significativo. Un cambio a base de pequeños detalles, como por ejemplo consiguiendo una mayor humanización de espacios, como la iluminación de la Navidad en la plaza Bolívar para el disfrute de los ciudadanos y no se pierda la magia decembrina; el comienzo de la limpieza (barrido, desmalezado, remoción y recolección de desechos) de las calles; visitas a los centros de salud. Te siento con ganas de enfrentar los problemas de todos los sectores. Tengo la ilusión de que llegó alguien capaz de pensar, por fin, a lo grande; porque creo que Villa de Cura necesita urgentemente un planteamiento de gran alcance, ambicioso, inclusivo de todos los ámbitos que determinan la convivencia de más de 150.000 personas, despojado de anticuados prejuicios que contraponen lo público y lo privado, y capaz de identificar una vocación para nuestra ciudad y crear entusiasmo sobre lo que queremos llegar a ser.
En este tiempo complejo, de incertidumbre y de cambios, no valen los dogmatismos ideológicos, es preciso escuchar y dialogar, en un ejercicio de empatía, con quienes piensan diferente. Es el momento de generar un consenso amplio y estable, en aquellas cuestiones estratégicas de transformaciones, aquellos proyectos que todos tenemos en mente y que son clave en la mejora de las condiciones de vida de los ciudadanos y en la imagen y proyección de Villa de Cura. Me gustaría ver la colaboración leal y sincera del sector de la oposición con nuestra alcaldesa. Sería una acción ejemplar para la convivencia, para recuperar un clima de ilusión, confianza y, sobre todo, del orgullo de ser villacuranos, los que vivimos, trabajamos y soñamos aquí.
Quiero una Villa de Cura viva e inclusiva, quiero una ciudad rica en significados, compleja, de gente diversa y que la libertad de los muchos proteja también la libertad de los menos. Una ciudad en que la palabra tolerancia no sea necesaria porque todos entendamos ya que el otro tiene también derecho. Una ciudad popular, pero no populista, en la que todos los pensamientos, por más divergentes que sean, tengan cabida.
Anahis: poco más me queda por decir, sé que no es fácil dar respuesta a un ingente caudal de ilusión; no te espera un camino fácil, lo sabemos. No voté por ti, pero los que de verdad queremos a Villa de Cura, como tú también la quieres, vamos a darlo todo para que hagas de esta tricentenaria histórica ciudad, fundada por el abuelo de nuestro libertador Simón Bolívar, la orgullosa patria chica que todos queremos y merecemos. No me cabe la menor duda que trabajarás incansablemente por lograr el mejor futuro para nuestra ciudad, cuna de los mundialmente reconocidos Niños Cantores; famosa por esa gran manifestación de fe religiosa como lo es la procesión del viernes santo de la sagrada imagen del Santo Sepulcro y la Peregrinación a la Gruta de la Virgen de Lourdes; ciudad que fue en un tiempo capital de Venezuela; también llamada la Atenas de Aragua; que vio salir de su casa de gobierno dos presidentes de la República: Joaquín Crespo e Ignacio Andrade y destacó en el concierto de las ciudades venezolanas por la presencia en ella de distinguidas personalidades de la política, la cultura, el deporte, el clero, el periodismo, la música y las artes; de la guerra y del foro; tierra del Alma Llanera. Créeme, no existirá mayor orgullo para ti que ser alcaldesa del municipio Zamora.
Deseo sinceramente que durante tu mandato puedas llevar a cabo la mayor parte de tus proyectos y que en tu desempeño puedas ser también un referente positivo para orgullo de todos. Que desde Villa de Cura podamos volver a ver las estrellas, y haz, que el brillo de tu ciudad no sea la polución atmosférica, sino la vida, la salud y la energía de sus habitantes. Quiero seguir pensando que esta ciudad aún es posible y es la mía.
Un cordial abrazo,
Chencho Adames Aponte
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